Pero para ser abogada, Scarlet no tiene que esperar graduarse, porque ella es una defensora natural
by Hergit "Coco" Llenas
Scarlet Smith nació hace 28 años en un pueblo de 800 habitantes, por cuyas callejas de polvo y piedra
por no pasar, ni pasó la guerra
sólo el olvido… como un pueblo blanco inventado por Serrat.
Es la hija de un padre drogadicto, y en la cárcel, y una madre que la tuvo a los 14 años y quien después de una vida corta, falleció a causa de un hígado severamente abusado.
En una época Scarlet vivió con su tía, luego con unos primos lejanos, más tarde con los abuelos y luego con los otros abuelos, y además vivió de una casa adoptiva en otra; recogida por el programa de adopción temporal.
Tal vez a fuerza de vivir en un estado de permanente supervivencia, Scarlet ha desarrollado un olfato prodigioso para leer y entender la gente. Un olfato que le ha servido para elegir personas positivas que se han convertido en sus mentores. Personas que la han colmado de inspiración y le han servido de ejemplo.
Scarlet es la prueba con faldas de que cada quien es responsable de crear su propio destino, que no hay obstáculo insalvable.
Graduada de la Universidad de Nevada Las Vegas (UNLV) en Psicología, también estudió italiano e historia romana en Torino, Italia. Así mismo, el año próximo recibirá el título de abogada, el cual planea complementar con una maestría en Administración Pública.
Pero para ser abogada, Scarlet no tiene que esperar graduarse, porque ella es una defensora natural. Aboga por los desfavorecidos y por aquellos tratados con desigualdad. Su labor en favor de los niños adoptivos le ha merecido el reconocimiento oficial del Senador Harry Reid.
Así mismo, ha trabajado ayudando a las víctimas de tráfico sexual y no descansa de luchar por los derechos de la comunidad gay.
Es una persona trabajadora, extrovertida y con mucha empatía. Aunque nos aclara “que tener empatía no es tenerle lástima a la gente, porque llega un momento que no valen más las excusas”
Ella misma, de haber querido, hubiera podido encontrar mil razones para no salir adelante. Y sin embargo, Scarlet se ha impuesto por encima de todas sus circunstancias. Convencida de que lo que llamamos “suerte”, no es otra cosa que un encuentro entre el esfuerzo personal y la oportunidad.
Y por este empeño tuyo, tu calibre humano y tu carácter indómito es que con gran emoción, Scarlet, heroína, hoy te celebramos!